viernes, 3 de mayo de 2013

La construcción de la propia imagen

La autopercepción es la imagen que se hace el individuo de él mismo.
 
Este desarrollo de nuestra autoimagen y autoconcepto comienza desde la niñez en el seno familiar y con las experiencias e información que asimilamos del entorno. Dicho desarrollo le hacemos en base a 3 componentes:

·         Perceptivo: tamaño y forma de nuestro cuerpo.
·         Cognitivo-afectivo: los pensamientos, sentimientos y valoraciones que nos provoca nuestro cuerpo (tamaño corporal, el peso, determinadas partes del cuerpo que nos gustan más, etc.).
·         Conductual: las consecuencias de lo anterior. Debido a cómo percibo mi cuerpo y cómo me siento con él, modifico mi comportamiento y adopto una actitud determinada (me acepto o me rechazo).

Es fundamental el concepto de belleza en la cultura que uno se desarrolla. La cultura nos enseña qué es lo bello y qué es lo feo.
 
A lo largo de la historia esta concepción ha sido diferente, y en la actualidad las distintas sociedades que existen marcan patrones físicos, de imagen corporal e “ideales” de belleza.
 
EJEMPLOS

·         El caso de las mujeres jirafa de Birmania, la belleza se mide por los aros de latón que consigan colocar en su cuello (puede llegar a medir 25 cm) hasta deformarlo.

 
·         La mujer Tuareg en cambio es valorada por los michelines que consiga acumular en su tripa, hasta doce cuando se incline.
·         A las adolescentes de Papúa Nueva Guinea, les estiran los pechos hasta dejarlos caídos. Solo así podrán encontrar marido y casarse.
·         La belleza de las mujeres etíopes, se caracteriza por tener los labios deformados con discos de arcilla (cuanto más mejor). Es lo más admirado por los varones.

 
·         En China, aún quedan mujeres a las que les vendan los pies desde pequeñas hasta deformarlos e impedir el movimiento natural con el fin de conseguir tener unos pies “loto dorado”.

Quienes poseen estas características suelen valorarse de manera más positiva, lo que les lleva a tener alta autoestima, y quienes no las poseen tienden a valorarse de manera más negativa.

El producto de la autopercepción es subjetivo y puede discrepar con la realidad. Esto puede llevar a diversas enfermedades, que no solo conllevan cambios físicos, sino también psíquicos y sociales. Algunas de ellas son:

·         Anorexia
La anorexia es una alteración de los hábitos y/o comportamientos involucrados en la alimentación motivada por la preocupación por la comida y el temor a ganar peso. La persona enferma inicia un régimen para perder peso que conlleva la reducción de la cantidad de alimentos que se ingieren.

·         Bulimia
La bulimia es un desorden alimenticio causado por la ansiedad y por una preocupación excesiva por el peso corporal y es aspecto físico. La persona enferma sufre episodios secretos de ingesta compulsiva de alimentos, seguida por métodos inapropiados para controlar el peso (como el vómito auto-inducido, el abuso de laxantes o la excesiva realización de ejercicio físico).
 

Como consecuencias de estas enfermedades se pueden desencadenar múltiples trastornos:

·         Somáticos: son debidos a la mala nutrición o al abuso de laxantes. Pueden ser problemas dermatológicos (color de piel blanco o amarillento, arrugas en la cara, uñas quebradizas, irregularidades menstruales, deficiencias de calcio y problemas óseos, alteraciones circulatorias, disminución del interés sexual, pérdida de dientes, etc.
·         Emocionales: obsesión, inestabilidad, culpabilidad, temores, ansiedad, irritabilidad, susceptibilidad, malhumor, depresión, tristeza, odio, etc.
·         Conductuales: reducción del repertorio de comidas, ejercicio físico excesivo, atracones seguidos de vómitos, comportamientos extraños, impulsividad, mentiras, consumo de alcohol y drogas, etc.
 
Para concluir, me gustaría compartir este vídeo en el que se muestran varios testimonios de personas que son conscientes de que padecen anorexia y quieren cambiarlo.
 


Bibliografía

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